jueves, 31 de marzo de 2016

Un paseo por la baja Calderona

Partimos con un día radiante desde la urbanización Chuliesa y nos dirigimos hacia el canal principal del embalse de Benagéber por caminos amplios, una vez en el canal, casi transcurridos los primero 5000 metros, las piedras dan paso a la gravilla, el pedaleo es cómodo y rápido, se nota una ligera inclinación positiva pero aún así, la conversación matutina y la facilidad del rodar hace que estos primeros kilómetros sean llevaderos y pasen a gran velocidad.
Es cerca del kilómetro 7 cuando cambiamos totalmente de superficie, ahora rodamos por caminos de tierra y piedra rodeados de pinos, todo en una ligera ascensión salpicada en algunos tramos de algún porcentaje subido de tono que nos recuerda que la montaña no se va a dejar batir sin ofrecer resistencia.

Cruzamos el barranco del Forat, con algún porcentaje cercano al 12%, pero nada que no podamos superar subiendo piños y apretando los dientes, de momento el paisaje no es muy distinto del acostumbrado por las montañas de la zona, zonas de pinada que seguro vivieron épocas de mayor frondosidad, matojo bajo y la sensación que te llevas cada vez que pasas por zonas como esta de que ojalá no sea la última vez que veas lo poco verde que queda.

Continuamos nuestro pedalear y es pasado el kilómetro 12 cuando, después de estar un rato subiendo poco a poco te encuentras con la única "tacha" realmente dura, es tras un par de serpenteos que hace el camino cuando de golpe y sin previo aviso aparece ante tí una "pequeña" pared con alguna pendiente que alcanza el 33%, las piernas se quejan, rabian, ante semejante desnivel, pero no hay nada que un platito y un gran piño no puedan solucionar.
Continuamos con el continuo tirar para arriba y llegamos a  giro pronunciado a la izquierda tras llegar a unos corrales donde no tenemos más remedio que para para admirar el paisaje que se planta ante nuestros ojos.

Montañas que quedan grabadas en nuestra memoria con la esperanza de poder subirlas en próximas visitas, caminos y más caminos, campos de cultivo, en fin todo paraíso que cualquier biker desea tener cerca para poder rodar en libertad.
Continuamos hacia el barranco de Bombón cruzando el barranco de Mora y dirigiéndonos hacia el barranco de Gabarra, es en este punto cuando abandonamos el camino y nos sumergimos en una senda estrecha que sube, aquí el cambio de pendiente y el terreno nos pilla por sorpresa y nos hace poner pie en tierra, conociendo la zona ya, es seguro que desde abajo sabiendo lo que se te viene encima lo encaras de otro modo y no es preciso quitar lo pies de las calas, pero la novatada la pagamos dando con nuestras suelas en la tierra.
Al llegar a la zona más alta de la senda observamos lo que queda de una pequeña aldea que vivió tiempos mejores, probablemente cuando la gente veía las montañas como un recurso natural que había que cuidar para poder obtener su fruto.

Continuamos nuestro camino entre pinadas y ya se torna más suave, dejamos el ligero ascenso y notamos como poco a poco nuestra velocidad empieza a crecer hasta llegar a algo parecido al paraíso, un gran campo de naranjos se extiende ante nosotros y no podemos más que dar gracias y tomar prestada una naranja que nos sabe a gloria y nos permite emprender los poco kilo,otros de vertiginosa bajada que nos queda hasta llegar a nuestro destino donde aguarda paciente el coche.
Al final resulta una ruta de 33,09 km, con un desnivel acumulado de 530 metros y una pendiente media del 3,98%, con un IBP de 33.
Enlace aquí.

Powered by Wikiloc

lunes, 7 de marzo de 2016

Sendas por Calicanto

Ruta de sensaciones encontradas la de hoy, la que transcurría por la sierra Perenchiza y sus alrededores.
Ya al bajar del coche y hacer un leve (insuficiente para variar) estiramiento me he dado cuenta que hoy mis piernas estaban un tanto acorchadas, lo cual no presagiaba nada bueno, menos mal que la ruta de hoy era bastante plana... Nada más lejos de la realidad, ruta dura,rompepiernas, con constantes sube y bajas, toboganes y con una gran dificultad para poder mantener un ritmo constante que a alguien de mis características es lo que le va mejor, pero por otro lado, ruta espectacular.
Si eres amante de las grandes pistas, anchas, con grandes subidas y plácidas bajadas, mejor olvídate de este pequeño viaje de hoy, subidas rotas, duras y cortas que sacan toda la potencia de tus piernas y te van exprimiendo hasta el último gramo de energía, bajadas trepidantes y muy técnicas, sendas estrechas y rápidas entre árboles y algo de asfalto, son los ingredientes que, una vez concluida la ruta te hacen mirar atrás con una sonrisa y decir, lo que, de nuevo, nuestro amigo chuachi dijo: "volveré".
Y es que allá por donde miraras salían sendas y más sendas, en una extensión corta de terreno te podrías pasar el día ciclando por sendas y muy buen seguro no repetirías tramos en exceso.
Lástima la mano del hombre que no sabe mantener lo que tiene y deja desolación allá por donde pasa, nuestra huella patente a nuestro alrededor en forma de cenizas hace pensar que sería bonito que respetaran este pequeño vergel de vegetación y pinos que aún queda por disfrutar en esta zona tan duramente maltratada.
Hemos seguido el track de javier_ que descargamos de wikiloc, dado a la gran cantidad de caminos y a los constantes 8 que hacíamos en algunos cruces nos ha tocado dar media vuelta y volver sobre nuestros pedaleos, probablemente algún tramo lo hallamos hecho a revés de cómo lo hizo su autor inicial, pero, da igual, lo tomes como lo tomes, cualquier camino es bueno.
Han habido momentos de zozobra en los que realmente no preguntábamos si por donde íbamos era un camino o no, pero es la típica ruta de subidas cortas que tienen una recompensa en forma de bajada trepidante y técnica que te dejan un estupendo sabor de boca una vez estás abajo.
En definitiva, una ruta que por el IBP que nos sale podríamos decir que carente de dureza pero que va dejando huella en cada pedalead que das, no apta para ciclistas poco amantes de las trialeras y muy recomendable para aquel al que le guste ciclar entre árboles a buena velocidad.
Por cierto, ruta muy utilizada por los vecinos para pasear a los perros, así que probablemente entre semana se pueda hacer con más comodidad y con menos trastorno para los habitantes de la zona.
Así pues, buena apertura de una zona desconocida por nosotros, que nos deja con las ganas de volver y explorar con más calma.
Finalmente hemos hecho 39,04 km, con un IBP de 28.
Track aquí.


Powered by Wikiloc